miércoles, 14 de noviembre de 2012

meningitis

¿Que es la meningitis?

 Es la inflamación de las meninges. Las meninges son unas membranas que cubren el sistema nervioso central, es decir el cerebro y la médula espinal. Las meninges están bañadas en un líquido (líquido cefalo-raquídeo) y protegen el cerebro.


¿Cuál es la causa?La inflamación de las meninges, en prácticamente todos los niños con meningitis, está causada por una infección. Los gérmenes responsables de las infecciones que pueden ocasionar meningitis, salvo muy raras excepciones, son virus o bacterias.
Las meningitis causadas por virus (meningitis virales) son las meningitis más frecuentes de la infancia. Más del 90% de estas meningitis están causadas por virus pertenecientes al grupo llamado de los enterovirus y la evolución y el pronóstico, salvo casos excepcionales, son favorables. Este tipo de meningitis suele presentarse de forma de epidemias fundamentalmente, finales de primavera y, ocasionalmente, en otoños.

Las meningitis causadas por bacterias (meningitis bacterianas) son menos frecuentes.
Las bacterias implicadas con mayor frecuencia en nuestro medio son: neumococo, meningococo (tipos B y C) y, menos, haemophilus influenzae tipo b. La meningitis bacteriana es una enfermedad extremadamente grave, de ahí los esfuerzos médicos en intentar por un lado erradicarla (por medio de vacunas incluidas en el calendario de vacuna: anti-haemophilus influenzae tipo b, y, por otro, tratarla de manera agresiva una vez adquirida. Este tipo de meningitis es más frecuente en los meses invernales.


 Síntomas
Generalmente, los síntomas de los diferentes tipos de Meningitis son similares. Siempre que se presenten es indispensable que acuda a consultar un médico de forma inmediata.
1) Meningitis Meningocócica: La meningitis meningocócica se caracteriza por un comienzo repentino y cuyos síntomas más frecuentes son fiebre, decaimiento general, dolor de cabeza intenso o llanto persistente en niños pequeños, náuseas, a menudo vómitos y rigidez de la nuca. El signo más característico es la existencia de manchas de color rojo vinoso en la piel.
El meningococo puede afectar diversos órganos, ya que cuando la bacteria ataca las meninges (membranas que envuelven el cerebro), produce la inflamación del líquido cerebro espinal y entonces se habla de "meningitis meningocócica". Por otro lado, si la infección se disemina por vía sanguínea, produce un cuadro llamado "meningococcemia", que consiste en una septicemia que puede presentarse con o sin meningitis y cuya evolución puede ser aguda o fulminante. Se caracteriza por un rápido colapso circulatorio con rash hemorrágico.
2) Meningitis por Haemophilus influenzae b: Los síntomas de esta infección son similares a los producidos por el meningococo, descritos anteriormente. La enfermedad afecta principalmente a niños de 2 meses a 5 años de edad. Su comienzo puede ser repentino o lento y es común que se presente confusión progresiva o coma.
3) Meningitis Viral o Aséptica: Los síntomas de la meningitis, aunque pueden ser diferentes en cada persona, en general incluyen fiebre, dolor de cabeza intenso, rigidez del cuello, fotofobia, somnolencia o estado de confusión, náuseas y vómitos. Si la infección es causada por coxsackie o echovirus, se presenta una erupción similar a la rubéola. Los síntomas intestinales y respiratorios, en cambio, pueden ser causados por enterovirus propiamente tal. En niños pequeños es más difícil identificar los síntomas, que pueden incluir fiebre, irritabilidad, dificultad para despertar o rechazo a la alimentación.





¿Cómo confirmar el diagnóstico?Cuando un niño tiene una meningitis, además de la inflamación de las meninges, el líquido cefalo-raquídeo que baña las mismas también se altera. Para realizar el diagnóstico se requiere examinar el líquido cefalo-raquídeo que baña las meninges del paciente. Para conseguir una muestra de este líquido, es necesario hacer una punción lumbar. Esta punción consiste en pinchar al niño en un espacio situado entre 2 vértebras en la parte baja de la columna vertebral (columna lumbar). Así se obtiene una muestra de ese líquido, cuyo análisis confirmará o descartará la existencia de una meningitis. El análisis de este líquido también es útil para diferenciar si un niño padece una meningitis viral o bacteriana.
La decisión de realizar una punción lumbar la toma el médico tras una exploración minuciosa del niño.
Un análisis de sangre no sirve para diagnosticar una meningitis. Tiene utilidad para intentar diferenciar una meningitis viral o bacteriana, pero no para saber si un niño tiene o no una meningitis.

¿Qué hacer?* Si pensamos que un niño puede tener una meningitis, debemos acudir rápidamente a un Centro de urgencia
* No todos los niños que presenten un dolor de cabeza discreto, vómitos y fiebre deben acudir a un hospital. En la gran mayoría de las ocasiones se tratará de enfermedades banales (infecciones virales, procesos gripales,...) o enfermedades menos severas (neumonía, infección del tracto urinario,...) que pueden ser diagnosticadas por el pediatra habitual del paciente.

En cambio, si el niño presenta un deterioro del estado general (tendencia al sueño, le cuesta responder o hablar espontáneamente,...) es recomendable consultar con rapidez en un Servicio de Urgencias.



¿Cómo se trata?* Meningitis viral: un niño con una meningitis viral requiere reposo, tomar líquidos abundantes y analgésicos (ibuprofeno o paracetamol).

* En el caso de que un niño presente cefalea muy intensa o vómitos repetidos es necesario el ingreso transitorio en el hospital para administrar líquidos y/o analgésicos intravenosos.
* Meningitis bacteriana: el tratamiento será siempre hospitalario. El niño debe ingresar en un Hospital para ser tratado y observado. Incluso, en ocasiones, los niños requieren permanecer las primeras horas en una Unidad de Cuidados Intensivos.

¿Cómo prevenir?* Vacunaciones: el desarrollo de ciertas vacunaciones ha conseguido prácticamente erradicar algunas enfermedades, no sólo algún tipo de meningitis bacteriana. Es el caso de la vacuna anti-haemophilus influenzae tipo b (anti-Hib). Esta vacuna fue introducida hace ya años en nuestro calendario vacunal habiendo disminuido dramáticamente la incidencia de meningitis por este germen..
Desgraciadamente aún no se dispone de vacuna frente a los gérmenes que ocasionan la  meningitis bacterianas frecuentes en nuestro medio:  meningococo tipo B. No existe vacunación frente a los virus causantes de meningitis virales.
Ha llegado una revolucionaria vacuna para ayudar a proteger a su hijo contra la enfermedad Neumococica Invasiva. Consulte a su medico pediatra para su protección.

Contactos: * Contacto con meningitis virales: no se requiere ninguna medida especial.
* Contacto con meningitis bacterianas: en caso de contactos estrechos (convivientes o compañeros de aula escolar) con niños que padecen una meningitis bacteriana por meningococo (tipos B y C) o haemophilus influenzae tipo b, está indicada la administración de un antibiótico profiláctico lo antes posible (a ser posible, en las primeras 24 horas).
Esto no sucede en el caso de que la meningitis bacteriana esté causada por un neumococo.
Tras recibir el alta hospitalaria, un niño que ha padecido una meningitis bacteriana puede reincorporarse a su vida habitual (familia, colegio,...), sin ninguna medida especial.

Vigilancia de los niños que han contactado con un paciente con meningitis bacteriana: los niños que han contactado con una meningitis bacteriana en su escuela, jardín o su familia deben ser observados. Los niños expuestos que comiencen con un proceso febril requieren una valoración inmediata por un pediatra.